Temperley volvió al entrenamiento tras la derrota, que en su segundo tiempo pareció un prólogo del partido contra Atlanta, por Los titulares efectuaron un trabajo regenerativo mientras que el resto realizó una práctica de fútbol.
Diego Rodríguez volvió a presentarse en el club para seguir con la recuperación y se lo ve de buen ánimo. En tanto Giannunzio, quien recibió una falta cerca del final del primer tiempo que lo resintió de la lesión que lo marginó durante 3 partidos del equipo, estará nuevamente entre algodones mientras que Maxi Nuñez quien preocupó a todos sobre el final del partido cuando vomitó, admitió que se encuentra bien y que se descompuso producto de un golpe en el estómago, uno de los tantos que recibió por el permisivo Fernando Rapallini.
Si bien el Celeste está a 7 puntos del último clasificado, Tristán Suárez con 48, y quedan 5 partidos finales con 15 puntos en disputa, la actitud mostrada en el primer tiempo del partido no da para ilusionarse con entrar al Reducido, aún así el equipo cuenta con chances mínimas de lograrlo, pero chances al fin.
Con esa idea mañana el equipo vuelve a entrenar en el Beranger.
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